Cuando uno termina una meta atletica que tenias en frente por varios meses, como lo fue la maraton de NY para mi, es facil sentir un vacio interno. En los ultimos meses, la maraton nunca estaba lejos de mi mente, generalmente cumplia mi cuota de ejercicio a muy tempranas horas de la manana pero igualmente ahi estaba el pensamiento de la carrera durante el dia. Ya sea porque tenia que cuidar la alimentacion o no hacer ciertas cosas por miedo a lesion o simplemente en conversaciones con otros atletas. Ahora termine la meta y que pasa?
No pasa nada! Seguimos con el habito de la buena alimentacion y ejercicio sano, porque me gusta y el cuerpo me lo pide, pero simplemente no tiene que dominar mi vida. (Por lo menos por unos meses hasta que la cosquilla de la Maraton de Boston entre en el sistema y comience a prepararme para esa.) Mientras tanto, se sigue la rutina laboral y de ejercicios y se aprovecha para dedicarle mas tiempo a la familia.
La verdad que Analisa ha sido una esposa y madre ejemplar siempre pero especialmente durante los ultimos meses ya que ha sabido ceder y apretar cuando era necesario pero por encima de todo siempre me ha apoyado en mis "metas medio locas" como dice ella. Un enorme GRACIAS y un mas grande TE QUIERO por ayudarme a alimentar las vivencias y la de Boston sera en tiempo compartido!
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